La influencia de la alimentación en la conducción.
La alimentación saludable es aquella que aporta a cada individuo todos los alimentos necesarios para cubrir sus necesidades nutricionales, en las diferentes etapas de la vida y en cada situación de salud.
Si esto no sucede, y la alimentación no es la adecuada, puede tener efectos nocivos a la hora de conducir, pudiendo derivar en bajo peso con déficit nutricional, y en el caso opuesto, obesidad y sobrepeso. Ambas situaciones conllevarían riesgos a la hora de conducir, ya que el cuerpo no está en condiciones de poder llevar a cabo ésa tarea, pudiendo presentar: mareos, dificultades atencionales, dolor de cabeza, de estómago, visión borrosa, empeoramiento de enfermedades crónicas.
En cualquiera de los casos, se puede modificar, adoptando hábitos alimenticios nuevos y adecuándolo a una vida saludable en todos sus términos.
Para poder llevarlo a cabo se deben establecer metas y objetivos realistas, adaptados a cada persona; algunas recomendaciones para hacerlo son:
- Alimentación equilibrada y saludable: La alimentación influye en tu seguridad al volante. Una alimentación incorrecta puede generarte fatiga, somnolencia, pesadez, reducir tus reflejos, tu capacidad de atención y aumentar el riesgo de accidentes.
Por el contrario, una alimentación equilibrada y variada te puede ayudar a realizar un buen viaje y evitar cualquier contratiempo. Además, en este trabajo, suelen hacer la mayoría de sus comidas fuera de casa y debido al escaso tiempo con el que cuentan para alimentarse es muy frecuente que se opte por algo fácil, rápido para comer, poco nutritivo; y esto suele tener una gran repercusión en la salud. Además puede resultar pesada, de difícil digestión, lo que conlleva incomodidad a la hora de tener que seguir conduciendo; lo ideal es consumir alimentos frescos y preparados por uno mismo.
- Después de realizar una comida, es recomendable esperar entre 15 y 20 minutos antes de empezar a conducir, ya que al comer se reduce la capacidad de atención y las posibilidades de cometer algún error o imprudencia se incrementan.
- Hidratarse bien: Tan importante como la alimentación es la hidratación. La deshidratación genera fatiga y cansancio, afectando a la capacidad de concentración e incrementando la posibilidad de cometer errores al volante. Es aconsejable beber aunque no se tenga sed, ya que la sensación aparece cuando ya existe un cierto grado de deshidratación.
- Vigilar el peso: El sobrepeso está relacionado con un gran número de enfermedades, sobre todo cardiovasculares. Por eso es importante controlarlo y de ser necesario poder adecuarlo a lo saludable.
- Por otro lado, es importante organizarse, planificar que se va a comer y cuando, ya que la desorganización lleva a comer mal, y por otro lado la sensación de hambre aumenta tu ansiedad y el deseo de alcanzar cuanto antes el destino, lo que puede provocar ansiedad y un incremento inconsciente de la velocidad.
Si bien, lo ideal es tener 4 o 5 comidas diarias, es posible que en algunos viajes tengas que modificar esas cantidades, pero procurando organizar las comidas para cubrir las necesidades de nutrientes para poder funcionar correctamente durante la conducción.
- Evitar las distracciones, ya que si comes mientras conduces, dejarás de prestar la atención necesaria a la ruta y tendrás menos capacidad de reacción ante imprevistos.
- Ejercicio físico: El deporte suele dificultarse, ya que la rutina de trabajo tiene un ritmo complicado. Por eso, se recomienda aprovechar los pequeños momentos que se tengan para caminar o hacer algún ejercicio, por más mínimo que sea es preferible eso, antes que nada.
- Descansar adecuadamente: Dormir entre 7 y 8 horas diarias es lo recomendado por los profesionales de la salud, ya que es lo que necesita el cuerpo para poder descansar y recuperarse. Se sabe que la falta de sueño es uno de los enemigos más peligrosos a la hora de conducir.
- Desayuno: es aconsejable no emprender el viaje con el estómago vacío, realizar un desayuno lo más nutritivo posible; ya que el desayuno se considera la comida más importante por ser la primera después de un largo período de ayuno mientras el cuerpo está dormido, ya que en ese momento, muchas funciones cerebrales «se duermen» necesitando del aporte energético que les proveerá el desayuno para reactivarse para el día.
- Después de realizar una comida completa, es recomendable esperar entre 15 y 20 minutos antes de empezar a conducir, ya que al comer se reduce la capacidad de atención y las posibilidades de cometer algún error o imprudencia se incrementan.
- No consumir bebidas alcohólicas, pero tampoco energizantes, muchos las consideran como “salvadoras”, pero la realidad es que disminuyen la concentración y el tiempo de reacción y pueden producir problemas cardíacos en personas con antecedentes.
- Por eso, si está cansado se debe parar a descansar, no hay nada que pueda reemplazar el descanso que el cuerpo necesita.
El cuerpo es un todo y debe contar con las necesidades básicas para funcionar bien, de lo contrario tendrá consecuencias y repercusiones en cualquier aspecto de la vida.